Humor Negro y Ácido

El humor es absurdo. El humor es sorpresa. El humor escarba en lo más profundo de nuestra alma y nos devuelve una caricia.
También, el humor, puede encontrarnos en nuestro lado más oscuro, nuestro lado animal. Chocando con nuestras moralidades, nuestra historia, nuestra educación.
El humor más siniestro ataca nuestra alma inocente y nos replantea dudas existenciales.
Pero, ha tener en cuenta, no deja de ser humor. Y esté quiere decirnos algo, sin herirnos.
Sabemos que no siempre estamos de ánimo para reírnos, pero las tinieblas de este humor no basta con el ánimo, sino con los sentimientos.
Puede ser dañino si nos afecta de forma directa. Pero también puede ser irónico y ayudarnos a pensar que no estamos tan mal.
Reírnos de nosotros mismos, no puede hacer tan mal, no tiene que hacer mal. Solo hay que saberlo tomar.
Bienvenidos.

sábado, 2 de julio de 2011

Parto Extraño

Una de tantas historias de las que me he encontrado es la de una señora que tuvo una situación nefasta cuando fue a dar la luz.
Durante el parto la cantidad de médicos, la mirada entre ellos, y la duración de dicha operación le resulto algo sospechoso. Igualmente siendo su primer hijo, escaseaba de experiencia. Se bastaba de anécdotas de terceros, cómo la de familiares y amigos.
El niño era muy esperado por el meloso matrimonio. Años de haber luchado por comprarse su departamento, juntando moneda por moneda, vendiendo unos terrenos, un auto y ahorrando pudieron hacerse de un hogar para construir su familia feliz. Además el esfuerzo era doble al querer terminar la carrera de abogacía antes de encargar un chico. Sin duda era el niño la recompensa de tantos años de esfuerzo.
El alumbramiento fue complicado. Mucho trabajo de parto, muchas frentes transpiradas. Conversaciones extrañas entre médicos y enfermeros. Mucho nerviosismo y ansiedad.
Furia, bronca, sentimientos extraños indescriptibles mostraba esa mujer a su marido.
Después de unos minutos de haber nacido el bebé, el doctor regresa con el niño en brazos para enseñárselo a la muy feliz mamá, que entusiasmada le dice:
-Puedo tomarlo ahora doctor.
- Un momento señora.- Contesta el doctor.
-Le quiero mostrar una cosa-
Entonces lo mira al niño que tenía en brazos y le dice: -Dígale hola a la mamá, vamos estuvo 9 meses y cómo dos horas esperándolo.-
La mujer sonreía sin entender nada, pero ella estaba agotada después de tan largo parto. Solo quería tener al nene en brazos.
El médico insistía, pero ya con otro tono.
-Vamos, dígale hola, no sea irrespetuoso con su madre, tan chiquito y ya tan irrespetuoso.-
En eso el Doctor empieza a sacudirlo y a darle palmaditas. Ahora vuelve a insistir con una voz mucho más fuerte, más enojado. –Vamos, dígale hola a su madre, vamos, queremos oír como dice hola, sino lo tiro por la ventana.
Obviamente la madre se estaba poniendo nerviosa, y más aún cuando escuchó la amenaza que le proponía el profesional a su niño recién nacido.
Es ahí cuando el médico agarra de los tobillos a la rojiza criatura y lo cuelga afuera de la ventana del edificio, volviendo a insistir.
-Vamos, decí “HOOOLAAAA”, sino te tiro de acá y estamos en el piso 12- En eso ya con la mujer llorando por su hijo y desesperada el medico lo suelta haciendo que el nene se estrelle contra el un auto que circulaba por la calle, y este rebote dando contra el asfalto y pisado con las ruedas de un micro escolar que justo pasaba en sentido contrario al del auto.
La mujer desesperada y llorando le dice gritando desesperada con los ojos llorosos y llenos de ira: -"ENFERMO, ENFERMO, SOS UN ENFERMO, QUE TE PASA PSICOPATA, ESTAS ENFERMO, MI HIJO…O…O”
Y el médico se da vuelta se distancia un poco de la ventana y le contesta: -No sé preocupe señora, era una joda, ya había nacido muerto.-